A primera vista, podría parecer que los chilenos conocen todo lo que hay que saber sobre alcohol. Después de todo, este país produce algunos de los vinos más finos del mundo junto con una variedad de espumosas cervezas y el famoso trago “pisco sour”. Para la pareja australiana compuesta por Kiera Shiels y Matt Oberg, había algo que aún faltaba en los bares en Chile. Ese algo era el gin.
Gin -- está de moda, es sabroso, moderno y se combina en una gran cantidad de tragos. Cuando Shiels y Oberg notaron un espacio en el mercado, supieron que tenían que aprovechar la oportunidad. Sin ninguna experiencia previa en destilación y no mucho español, dieron un salto de fe y decidieron abrir su propio bar y destilería en Puerto Natales, Chile. Nombraron a su negocio “Last Hope Distillery” lo cual va de la mano con el nombre del “Fiordo Última Esperanza (Last Hope)” de la región.
Con más de 130 comentarios y una puntuación de 5.0 en Google Reviews, es claro que los clientes están más que entusiasmados por los productos de Last Hope. Actualmente, la compaía produce y vende dos tipos de gin: Patagonian Dry y Calafate Gin. Patagonian Dry Gin es una elección clásica y popular, mientras que Calafate Gin ofrece un giro más colorido y peculiar. Tiene un offers a more colorful and quirky twist. Está teñido con un profundo tono de púrpura al estar infundido con kilos de bayas de calafate fresco, un fruto nativo de la región. Adicionalmente a los dos gin, poseen una variedad de creativos tragos disponibles en el bar.
Pero esto es más que sólo tragos. De acuerdo a Shiels, el lugar tiene una suerte de energía que no encuentras en cualquier bar. “Conocemos a la gente, escuchamos su historia y les contamos la nuestra” nos cuenta. Siendo los dueños del bar, Shiels and Oberg conocen un abanico de gente con experiencias únicas e inspiradoras historias. “Acá hemos tenido gente que ha ascendido el Everest tres veces o capitanes que han conducido barcos de fibra de carbono en el Océano Antártico a través de icebergs”. “Y no puedo contar la cantidad de personas que han llegado acá en un automóvil o bicicleta desde Alaska” cuenta Shiels. “Realmente es un crisol de personas interesantes”.
Además de recibir viajeros y extranjeros, una gran porción de sus clientes son locales. Shiels se ha dado cuenta de que una gran parte de los chilenos que viven en Puerto Natales han llegado de otras partes de Chile en busca de algo nuevo. Por esta razón, encontró que los locales tienden a ser personas muy abiertas de mente que están dispuestas a hacer amigos y probar cosas nuevas. “Nunca hicimos algo como esto antes y ellos (los locales) nunca tuvieron un bar como este”, dice Shiels. “Así que, cometimos algunos errores y aprendimos como hacer esto, mientras ellos aprendían lo que hacíamos”. Desde el comienzo, el público chileno ha sido muy receptivo a Last Hope, sus productos y su ambiente.
Desde la apertura de Last Hope en abril de 2017, Shiels and Oberg han visto un gran crecimiento y sus productos han aumentado en popularidad. Nuevas tiendas y bares están interesados en comprar sus productos y ellos continúan obteniendo evaluaciones y comentarios positivos. Como una meta a largo plazo, Shiels and Oberg esperan producir whisky de buena calidad. Por ahora, continúan sirviendo, produciendo y conociendo nueva gente de todo Chile y otros países - personas que se unen gracias al gin.
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